Dediquémonos a ver las golondrinas emigrar, 
respiremos, 
vivámonos, 
pedacito a pedacito disfrutémonos; desnudémonos, 
saboree mis esperanzas, 
mis miedos, 
mis remordimientos. 
Déjeme probarle los errores o los vicios. 
Emigremos nosotros, 
admiremos las auroras, 
los estrechos, 
los anchos, 
el hoy y no el ayer o el mañana. 
Sin que se sienta como una carga téngame y déjeme soportarlo...






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